El tarot es un rico tapiz de temas entrelazados. Desde la numerología hasta los elementos, desde los palos hasta las modalidades, el estudio del tarot es infinito, pues siempre encuentra un significado más profundo al leerlo.
Hoy me gustaría hablar específicamente sobre la astrología de los arcanos menores. Se trata de las cartas del 2 al 10 de cada palo: Oros, Bastos, Copas y Espadas. Por ahora, no contamos los ases ni las cartas de la corte para simplificar, pero aún queda mucho por explorar y practicar solo con las cartas del 2 al 10.
Primero, repasemos la estructura básica (es posible que ya conozcas algo de esta información, pero ten paciencia) y luego veremos en detalle cómo la astrología afecta a cada carta.
Astrología en el tarot: fundamentos para principiantes
Las varitas corresponden a los signos de FUEGO: Aries, Leo y Sagitario.
Las Copas corresponden a los signos de AGUA: Cáncer, Escorpio y Piscis.
Las espadas corresponden a los signos de AIRE: Libra, Acuario y Géminis.
Los pentáculos corresponden a los signos de TIERRA: Capricornio, Tauro y Virgo.
Quizás ya lo sepas si lees mi Cómo estudiar los Arcanos Menores correo.
Aquí está el siguiente paso.
Modalidades astrológicas y tarot
Cada elemento (fuego, tierra, aire y agua) tiene tres signos. Sin embargo, Aries es muy diferente de Sagitario y Leo, aunque comparten el mismo elemento fuego.
Lo que hace la diferencia se llama modalidad o cualidad. Hay tres modalidades.
#1. Cardenal
Estos signos, Aries, Cáncer, Libra y Capricornio, inician sus respectivas estaciones. Aries comienza la primavera; Cáncer, el verano; Libra, el otoño; y Capricornio, el invierno. Son el primer signo de cada estación. Esto les confiere la cualidad especial de ser emprendedores y emprendedores. Son excelentes líderes.
En el tarot, la modalidad cardinal rige los números 2, 3 y 4.
#2. Corregido
Estos signos, Tauro, Leo, Escorpio y Acuario, se encuentran en la mitad de sus respectivas estaciones. Tauro, primavera; Leo, verano; Escorpio, otoño; y Acuario, invierno. Son el signo central de cada estación. Son excelentes para mantener un ritmo constante, como un caballo de batalla.
En el tarot, la modalidad fija rige los números medios, 5, 6 y 7.
#3. Mutable
Estos signos, Géminis, Virgo, Sagitario y Piscis, se encuentran al final de sus respectivas estaciones. Géminis, primavera; Virgo, verano; Sagitario, otoño; y Piscis, invierno. Son el último signo de cada estación. Son ideales para el trabajo entre bastidores que requiere improvisación y comunicación, ya que no les gusta estar quietos.
En el tarot, la modalidad mutable rige los últimos números, 8, 9 y 10.
Aquí está el último paso que involucra a los planetas.
El papel de los planetas astrológicos en el tarot

Los planetas interiores (Sol, Mercurio, Venus, Marte, Júpiter y Saturno) desempeñan un papel en los arcanos menores. A partir de Aries, el orden es Sol, Venus, Mercurio, Luna, Saturno y Júpiter, y luego se repite alrededor de la rueda.
Los planetas son la base misma de la astrología. Signos como Leo y Acuario son abstractos, por lo que no se reflejan con mucho realismo. Cuando un planeta está bajo un signo, como la Luna en Libra, las cosas se aclaran. Aquí tienes una lista de las palabras clave de los planetas relevantes para el tarot.
Sol—ego.
Venus—amor.
Mercurio—intelecto.
Luna—oculta.
Saturno—restricción.
Júpiter—expansión.
Cada planeta está asociado con una carta numérica a la vez, por lo que Marte en Aries es el 2 de Bastos. El Sol en Aries es el 3 de Bastos, y Venus en Aries es el 4 de Bastos.
Ahora veamos cada tarjeta con este nuevo conocimiento.
Cómo leer la astrología en el tarot
Echemos un vistazo a los gráficos juntos y comencemos con los Bastos.
Los bastos 2, 3 y 4 están regidos por el Fuego Cardinal (Aries).

El Dos de Bastos en el tarot suele representar la elección, la prosperidad y la oportunidad. Esta carta pertenece al Fuego Cardinal y representa a Marte en Aries. Por lo tanto, esta carta es... muy Ardiente y muy dispuesto a empezar algo nuevo.

El Tres de Bastos: paz, espera y visión. Solía confundir el Dos y el Tres de Bastos. Con la astrología en juego, entiendo sus diferencias. Con el Sol en Aries en lugar de Marte, esta carta es mucho menos agresiva.

El Cuatro de Bastos: pequeñas celebraciones, emoción, unión. Tradicionalmente, la carta representa el matrimonio y las pequeñas celebraciones locales (como fiestas en casas). Venus en Aries se puede ver aquí como un fuego equilibrado y más tranquilo.
Los bastos 5, 6 y 7 están regidos por el Fuego Fijo (Leo).

El Cinco de Bastos: tensión, competencia y nuevos negocios. Lejos de ser tímido, Leo está listo para asumir este desafío restrictivo. Saturno en Leo no lo pasa nada fácil, pero esta carta es de acción y actividad, no de derrota.

El Seis de Bastos: reconocimiento, celebración y victoria. Recibir esta carta es una gran sensación, ya que es prácticamente un desfile. Júpiter en Leo disfruta de la admiración y el orgullo que le inspira.

El Siete de Bastos: asedio, desafío, desafío. Marte en Leo aquí se refiere a la guerra entre el mundo interior y el exterior. Esta carta aparece, por ejemplo, cuando personas cercanas a ti están en tu contra en algún asunto.
Los bastos 8, 9 y 10 están regidos por el Fuego Mutable (Sagitario).

El Ocho de Bastos: movimiento rápido, actividad intensa, cambio. Esta carta representa a Mercurio en Sagitario, por lo que su energía es siempre cambiante y dinámica.

El Nueve de Bastos: en guardia, defensa. La Luna en Sagitario hace que esta carta se refiera a cosas ocultas. Con esta carta, no estás seguro de qué te estás protegiendo. Como Sagitario, jovial y comunicativo, no le gusta estar bajo la Luna, esta carta está llena de conflicto interno.

El Diez de Bastos: Exceso de trabajo. La vieja carta de "olvidé por qué estaba haciendo esto". Cuando estás agobiado, esta carta aparece. Como Saturno en Sagitario, representa la restricción de la alegría, la exploración y el movimiento.
Los pentáculos 2, 3 y 4 están regidos por el cardinal Tierra (Capricornio).

El Dos de Oros: malabarismo, desorganización, dispersión. Júpiter en Capricornio puede ser abrumador. Capricornio se caracteriza por el trabajo duro y la estructura. ¿Qué sucede cuando multiplicas esa concentración y esfuerzo por dos?

El Tres de Oros: maestría, networking, inversión. Aquí, Marte ayuda a Capricornio a aprovechar la oportunidad de obtener lo que necesita para progresar en el mundo corporativo: el reconocimiento.

El Cuatro de Oros: avaricia, cerrazón, estabilidad. Cuando el Sol está en Capricornio, todo se dirige hacia el centro, el ego de la persona. Toda esta abundancia material termina estancada.
Los pentáculos 5, 6 y 7 están regidos por la Tierra fija (Tauro).

El Cinco de Oros: reveses, tiempos difíciles, pérdidas financieras. Sin saber qué hacer consigo mismo y con la boca cerrada, Mercurio en Tauro se encuentra atrapado en una situación difícil. ¿Aprenderán a comunicar sus necesidades?

El Seis de Oros: generosidad, caridad, aceptar ayuda. La Luna en Tauro representa las cosas materiales ocultas. Al dar caridad, sabemos que no debemos dar tanto que nos pongamos en desventaja. Así que, aunque esta carta representa la caridad, sin duda hay algunos cálculos detrás.

El Siete de Oros: visión, espera, el tiempo lo dirá. Saturno en Tauro pregunta: "¿Fue suficiente mi trabajo?". Quizás sí, quizás no, pero es un tiempo de espera sólido (fijo) que se siente alejado de una esperanza clara.
Los pentáculos 8, 9 y 10 están regidos por la Tierra Mutable (Virgo).

El Ocho de Oros: artesanía, orgullo, paz espiritual. El Sol (ego) en Virgo se enorgullece de su trabajo, aunque no está tan apegado al trabajo en sí (como la Tierra fija, Tauro), sino más bien a lo que significa y adónde lo lleva.

El Nueve de Oros: comodidad, felicidad solitaria, lujo. ¡Es una vista hermosa: Venus en Virgo! Cuidadosa, amable y cariñosa con los animales pequeños, esta carta representa un momento en el que se alcanza un paraíso personal mediante el trabajo diligente.

El Diez de Oros: fortuna, familia, mucho dinero. Mercurio en Virgo es una pareja natural. A Mercurio le encanta estar en Virgo. Este signo de tierra mutable le da la libertad y la base para crecer y ser fructífero.
Las espadas 2, 3 y 4 están regidas por el cardinal Aire (Libra).

El Dos de Espadas: decisión difícil, estancamiento, tregua. La Luna (lo oculto) se manifiesta a través del signo de Aire de Libra como un bloqueo mental entre dos decisiones.

El Tres de Espadas: desamor, guerra, dolor. ¿Qué podría ser este desamor sino Saturno en Libra? Saturno, el planeta de las restricciones y los golpes duros, y Libra, el que prospera en las relaciones.

El Cuatro de Espadas: descanso, observación, preparación. Con Júpiter en Libra, esta carta representa un gran respiro al tener tiempo para reflexionar y descansar la mente.
Las espadas 5, 6 y 7 están regidas por el Aire Fijo (Acuario).

El Cinco de Espadas: arrogancia, orgullo, derrota. Representando nuevos y a veces insensatos comienzos, esta es la carta de Venus en Acuario. La ostentación y la rebeldía son evidentes en esta posición, al igual que en esta carta. A Venus no le gusta estar en Acuario, un planeta de mente cerrada, por lo que existe un factor perjudicial.

El Seis de Espadas: viaje, compañía, paz. Mercurio es el planeta que impulsa el movimiento en Acuario. Esta carta representa la libertad, algo que Acuario ama y que trabajará en mayor o menor medida con Mercurio (tradicionalmente regido por Géminis) para lograr.

El Siete de Espadas: robo, ocultación, engaño. Esta infame carta es la de la Luna en Acuario, también conocida como la del "engaño insostenible". En esta posición, Acuario se muestra distante y le gusta sorprender a la gente sin motivo alguno. Se considera "superior" a las emociones, lo cual, por supuesto, no es del todo correcto ni beneficioso; de hecho, es insostenible.
Las espadas 8, 9 y 10 están regidas por el Aire Mutable (Géminis).

El Ocho de Espadas: aislamiento, dolor, estar atrapado. Géminis se siente abrumado aquí, al estar bajo Júpiter, lo que multiplica su energía voluble y ansiosa. Sin embargo, Géminis también ve multiplicados todos sus atributos positivos aquí, por lo que puede liberarse con un cambio de perspectiva.

El Nueve de Espadas: angustia, preocupación, reflexión. Marte en Géminis le da a esta carta un toque agresivo en comparación con el Ocho de Espadas. Esta ansiedad tiene un toque mordaz: te persigue desde que despiertas hasta que duermes.

El Diez de Espadas: traición, final, destino. El Sol en Géminis muestra su aspecto sombrío: ser distante y voluble en las relaciones. Al final, esto les perjudica si no equilibran su ego.
Las copas 2, 3 y 4 están regidas por el Agua Cardinal (Cáncer).

El Dos de Copas: compatibilidad, alianza, encuentro. Venus en Cáncer. ¿Hay algo más dulce para la expresión emocional? El equilibrio y las relaciones de Venus son fuertes aquí.

El Tres de Copas: abundancia, compromiso, unión. Mercurio en Cáncer: la comunicación es con personas cercanas al hogar. Son tiempos prósperos en general con esta apertura emocional.

El Cuatro de Copas: pérdida trivial, egocentrismo, aturdimiento. Cuando la Luna está en Cáncer, es inevitable que algunos aspectos del corazón se oculten. Aquí es la gratitud la que se oscurece, difícil de ver.
Las copas 5, 6 y 7 están regidas por el Agua Fija (Escorpio).

El Cinco de Copas: pérdida, arrepentimiento, colapso. Las emociones se sienten con tanta intensidad que se siente como una guerra interna. Eso es lo que trae Marte en Escorpio. La desesperación se siente tan profunda como un pozo.

El Seis de Copas: nostalgia. En el lado positivo de Escorpio, al estar bajo el Sol, vemos un profundo aprecio por los aspectos espirituales de la vida.

El Siete de Copas: ilusión, parálisis de elección, fantasía. Venus en Escorpio siempre quiere... másEn astrología y tarot, esto puede llevar a situaciones complicadas. Esta carta aparece cuando no estás cerrando puertas, sino abriendo otras nuevas.
Las copas 8, 9 y 10 están regidas por el Agua Mutable (Piscis).

El Ocho de Copas: seguir adelante, viaje, abandono. Saturno en Piscis. No es una pareja ideal. Cuando Piscis se siente fuera de control, como le sucederá bajo Saturno, simplemente decide rechazar el desafío.

El Nueve de Copas: satisfacción, logro, indulgencia. Esta carta puede aparecer cuando sientes gran satisfacción al cuidar de tus amigos o familiares. Júpiter expande las cualidades compasivas y generosas de Piscis.

El Diez de Copas: paz, alegría, familia. Aunque Marte y Piscis no suelen llevarse bien, la combinación deja una puerta abierta al deseo de más, más y más. Un gran rasgo para la carta de la "familia feliz".
Eso es todo.
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