El significado de El Ermitaño

Introspección • Soledad • Iluminación

El Ermitaño es un signo de introspección necesaria. Es momento de reflexionar sobre uno mismo y evaluar dónde se ha llegado. También indica la necesidad de tomarse un momento de tranquilidad antes de dar el siguiente paso en el camino. El 9 es un número espiritual, por lo que esta carta se centra en el yo.

Con la mente agitada por haber aprendido sobre fuerza de voluntad, fuerza, éxito, orden, disciplina y tolerancia, el Loco anhela un momento de paz. Se encuentran con el Ermitaño, lógico y analítico, quien le implora que se retire del mundo y explore lo que hay en su mente para aquietarla.

Llevando una linterna para atravesar la niebla y la oscuridad, el Ermitaño representa el signo de Virgo y, por lo tanto, un sano escepticismo. El Ermitaño ama a los demás con tanta compasión como Fuerza, pero es más desapegado. Quiere que aprendas a honrar tu propia sabiduría. El Ermitaño puede ser signo de un fuerte deseo de alejarse de la sociedad, olvidarse de las cosas materiales y explorar nuestro eterno espíritu interior.

Si recibes esta carta en una lectura, es hora de dejar atrás las distracciones y concentrarte en tu proyecto más importante: tú mismo. La meditación es una gran idea ahora mismo, y con la energía divina del Ermitaño guiándote, la encontrarás aún más efectiva de lo habitual. A medida que los rincones secretos de tu mente se iluminan y las preocupaciones se desentrañan, cobrarás fuerza para continuar tu camino.

El ermitaño al revés

Aislamiento • Retraimiento • Ansiedad

Recibir el Ermitaño invertido en una lectura podría indicar que has estado aislado demasiado tiempo, dedicando más de lo necesario a reflexionar sobre tu interior. Podría significar soledad o retraimiento. En una relación, el Ermitaño invertido puede significar una separación excesiva e indeseada o que alguien anhela más afecto de la otra persona. Si estás soltero, esta carta invertida puede indicar que estás cansado de estar solo.